¿Funcionan realmente las joyas EMF?
Con frecuencia me preguntan si las piedras preciosas realmente tienen cualidades que promueven la salud, o si se trata de un montón de trucos y cortejos. Después de todo, no tenemos ninguna montaña de ciencia para fundamentar estas afirmaciones; al menos lo que nosotros, los occidentales, consideramos "ciencia válida". Sin embargo, las piedras preciosas y los cristales se han utilizado en todo el mundo durante milenios con innumerables propósitos curativos. Si no hubiera nada de esto, esperaría que esta práctica se hubiera abandonado hace mucho tiempo.
Cuando la gente me pregunta si las joyas EMF realmente funcionan, tengo una respuesta larga y una respuesta corta. La respuesta corta es: ¡no lo sé! No tengo forma de probarlo objetivamente. No soy un experto. La respuesta larga es que hay tantas explicaciones como personas ofreciendo una explicación.
Mi formación es en las ciencias. Hace treinta años, habría declarado que todo esto de la curación con piedras es basura. Pero en las últimas décadas me he dado cuenta de que cuanto más aprendo sobre el mundo, más aprecio la amplitud de lo que no sabemos y lo arrogantes que seríamos si afirmáramos que lo tenemos todo resuelto. La ciencia occidental es útil, pero no es el fin de todo.
He creado mis joyas EMF basándome en información recopilada de expertos en las artes curativas con cristales, personas que saben mucho más que yo sobre estos temas.
Lo que puedo decirles es que muchas personas con sensibilidad a los campos electromagnéticos (electrosensibilidad) informan que se sienten mejor en presencia de ciertas piedras y cristales. Estas personas son exquisitamente sensibles a la sopa electromagnética que nos rodea hoy. Por mi propia experiencia y la de otros, soy creyente.
En cuanto a una explicación de cómo funcionan, no lo sé. El experto en cristales Robert Simmons tiene una teoría. Postula que debido a que ciertos cristales actúan como resonadores y transductores de energías electromagnéticas (pensemos en cómo se usan la galena y la pirita en los receptores de radio de cristal), no es un gran salto imaginar que son capaces de transformar o amplificar otras formas de energía de manera que no son detectables por instrumentos científicos. También es concebible que nuestros cuerpos y/o nuestra conciencia sean capaces de detectar o "sentir" estas energías, particularmente cuando estamos en contacto con el cristal apropiado.
¿Mi recomendación para ti? ¡Pon algunas piedras en tu mano y decide por ti mismo!